Cristo atado a la Columna. Iglesia de la Trinidad. Sevilla

Información general

Tipología
Escultura
Provincia
Sevilla
Municipio
Sevilla
Autoría

Juan Giralte

Protección
La iglesia está declarada Bien de Interés Cultural por disposición de 27 de agosto de 1964 (BOE del 12 de septiembre de 1964)
Cronología
1565
Dimensiones
180 x 73,5 x 45 cm
Material
Cedro
Observaciones

La información sobre esta intervención está extraída de los informes de ejecución.

Colaboradores:
Rafael Fernández García (Doctor Arquitecto)
Miguel Ángel Marín Gallardo (Diseñador Gráfico)
 

Bibliografía relacionada

Gestoso y Pérez, J.: Sevilla monumental y artística: historia y descripción de todos los edificios notables, Sevilla, 1892; López Martínez, C.: "La Hermandad de la Sagrada Columna y Azotes de Ntro. Sr. Jesucristo", Calvario, 1951; Hernández Díaz, J.: Estudios de imaginería andaluza, Sevilla, 1954

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Datos históricos

El Cristo atado a la Columna de la iglesia de la Trinidad es obra documentada del escultor de origen flamenco Juan Giralte. Estilísticamente este autor muestra conexiones con Roque Balduque, en cuyo taller pudo haber trabajado, si bien delata mayor arcaísmo e incorrección en el dibujo.

La imagen fue titular de la Hermandad de la Sagrada Columna y Azotes de Nuestro Señor Jesucristo, hoy conocida como de “Las Cigarreras”, durante los años en que ésta, fundada en 1563 en la iglesia de San Benito, residió en el monasterio de la Trinidad, es decir, entre 1578 y 1589. Antes de la intervención se encontraba en un estado preocupante, ubicada en el almacén de la sacristía, si bien se sabe por Gestoso que a finales del siglo XIX aún recibía culto en una de las capillas del templo.

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Estado previo

El pésimo estado en que se hallaba la obra se debía, en buena medida, a su abandono y prolongada estancia en unas dependencias del monasterio con unas condiciones nada adecuadas para una buena conservación por sus grandes oscilaciones termo-higrométricas.

La imagen presentaba daños causados por una extensa colonización de hongos y por el ataque de insectos xilófagos, especialmente en las zonas que habían estado en contacto continuado con el muro y el suelo. Se apreciaban algunas grietas y aberturas en muchas de las uniones de las dieciocho piezas que componían la talla. Había desaparecido la parte anterior de los pies junto con su porción de base inferior, lo cual, unido a la irregularidad de la superficie de apoyo, hacía que la escultura no se mantuviera por sí sola en vertical. También había sido mutilada la corona de espinas y en su lugar aparecían agujeros de clavos, posiblemente usados para fijar alguna peluca o postizo. La figura de Cristo se mantenía unida a la columna mediante clavos dispuestos a la altura del hombro derecho y del antebrazo izquierdo, donde las piezas se encontraban totalmente desencajadas.

La preparación se había perdido en un 25% de la superficie y el resto corría grave peligro de desprendimiento. En la mayor parte de los ensambles se hacían visibles restos o trozos cortados de tejido de lino, del que podían distinguirse dos tipos. El original era un lienzo blanqueado de tafetán, hilatura gruesa y trama semicerrada. Aparecía usado también para producir efecto volumétrico en las heridas. El segundo tipo, tafetán de hilatura fina y trama cerrada, era fruto de una intervención posterior de remozamiento y repintado general. Puntualmente, en algunas grietas y en agujeros y oquedades de la cabeza se había utilizado cera de abejas.

La obra en su conjunto aparecía totalmente repintada. Sobre la policromía original fueron añadidas a lo largo del tiempo otras dos capas de policromía. En la zona del sudario los análisis previos detectaron restos de dorado originales que quedaban ocultos por una capa de yeso afectada por la actividad de hongos. El estado de conservación de las policromías era muy deficiente por falta de adhesión a la capa de preparación y de ésta a la madera; además se advertían los agrietamientos producidos en ésta. En total había desaparecido aproximadamente un 35% de policromía y dorado.

A nivel superficial se observaba, además de la acumulación de suciedad, la presencia de actividad orgánica en los barnices, que se manifestaba en forma de manchas agrisadas.
 

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Descripción de la intervención

Tras las labores de fijación y limpieza superficial, fue necesario separar algunas de las piezas de la escultura, dada la debilidad de los ensambles. Así pudieron limpiarse todos los depósitos de suciedad y las antiguas colas de las uniones. Se desinsectó y consolidó la madera y se extrajeron los clavos.

Se realizaron dos limpiezas de la policromía: una primera para eliminar una capa de barniz sucio, alterado y ennegrecido, con presencia de hongos; y una segunda para las manchas agrisadas que se repartían por la superficie.

Al tratarse de una imagen devocional, se decidió reintegrar volumétricamente la base de la columna, algunas uniones y los empeines de los pies de Cristo, aunque empleando formas esquematizadas, y se colocó una peana.

Las lagunas de preparación se estucaron y todas las zonas con pérdida de color se reintegraron pictóricamente con técnica acuosa, después de lo cual se protegió la superficie con barniz final semimate.
 

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Ficha técnica y planimetría

Entidad/es promotora/s
Dirección General de Bienes Culturales de la Consejería de Cultura y Medio Ambiente
Dirección y ejecución
Mauricio J. López Madroñero
Periodo de ejecución
-
Inversión
9.015,18 euros
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